Lucca está rodeada por una impresionante muralla renacentista, todavía intacta (!), larga más de 4 km. Hoy en día la muralla es el parque de la ciudad, lugar de tranquilos paseos, pero también el gimnasio de los deportistas y punto de encuentro de los Luqueses. En el centro de la ciudad se encuentra el anfiteatro romano más original jamás visto, configura una bellísima plaza elíptica circundada de casas multicolores. Me encanta comportarme como un turista y beberme un capuchino o un aperitivo en la plaza del Anfiteatro! Parece como si el tiempo se detuviese… Poco distante de allí se eleva una antigua torre medieval en cuya cima crecen encinas; un verdadero jardín! Se pueden subir los 230 escalones hasta la cumbre y disfrutar de un panorama de 360°: los Montes Pisanos, los Alpes Apuanos, las colinas luquesas y la ciudad a nuestros pies! Lucca tiene una elegante y sobria catedral dedicada a San Martín, que conserva en su interior el crucifijo más venerado por los luqueses: la Santa Faz, celebrado solemnemente cada año en el mes de Septiembre. Y además, Lucca es la ciudad donde nació Giacomo Puccini compositor de las óperas Manon Lescaut, La Bohème, Tosca, Madama Butterfly y Turandot!